¿Alguna vez te han dicho que eres ‘raro’ o ‘rara’?

De pequeña me decían esas palabras con tono de crítica: ‘eres rara’, ‘tú y tus rarezas’, unido a veces a ‘así como vas a tener amigos’. Os podéis imaginar a donde pueden llevar esos mensajes repetitivos, oídos desde que eres pequeña?

Si estás leyendo esto seguramente es porque alguna vez recibiste algún mensaje parecido y…la verdad…es que hacen mucho daño.

Oír esas frases me llevaron inconscientemente  a sentirme fuera de lugar, a desvalorizarme, a sentir que este mundo no está hecho para mi, a aislarme más de la gente, a dificultar más el relacionarme con las personas, a pensar que nadie podía comprenderme …

Puede que esas frases no me las dijesen para hacerme daño conscientemente, pues creo que más bien pensaban que ‘si me metían caña’ diciéndolas, me ‘espabilaría’ y cambiaría, y así sería como todos: ‘normal’, como ‘se tiene que ser’.

La cuestión es que mi esencia, mi naturaleza no se puede cambiar  así como así y cuando lo he intentado hacer para ‘adaptarme’ a lo que querían de mí, me he sentido muy mal: entraba en una gran incoherencia conmigo misma y eso se reflejaba en síntomas corporales. Os suena algo de lo que digo?

Ahora, desde la mujer adulta, me puse a pensar en que momentos me lo decían… y descubro que principalmente era cuando no me gustaba hacer algo que a casi todos sí. Era ‘rara’, por ejemplo: porque no quería ver las noticias o programas de prensa rosa, ni leer periódicos; o porque no me gustaba el follón de gente, de ruidos, y prefería tranquilidad; o porque si sentía una acción agresiva era fácil que llorase; o porque prefería azúcar moreno o miel a azúcar blanca.

Para mi esas cosas sencillamente entraban en ‘mis gustos’, pero parece que para otros ‘no eran normales’ y además parece que ‘les molestaba’ de alguna manera. En cualquier caso es su parecer y no está en mí el cambiarlo.

Ahora sé que todas esas cosas son algunos de los rasgos que caracterizan a las Personas Altamente Sensibles. Saber esto me ayudó mucho a quitarme yo misma el mensaje de ‘rara’ y llevarme a una aceptación de mi naturaleza sensible. Pude empezar a valorarme y cuidarme de una manera más concreta, al conocerme más.

Si nos paramos a pensarlo bien: todos tenemos nuestras ‘rarezas’ y estas, que son subjetivas, serán las que para el otro no pertenezcan a su baremo de lo que es ‘normal’. O sea, que siempre seremos ‘raros’ para alguien en alguna cosa.

Creo que nuestras ‘rarezas’ nos hacen únicos, diferentes y especiales y eso, contrario a lo que nos puedan haber dicho, es lo maravilloso de cada uno. Lo importante es sentirnos bien con nosotros mismos, con cómo hacemos las cosas y con las cosas que hacemos.

El haber pasado por experiencias como está me han ayudado a conocerme y a poder ayudar a personas que pasan por situaciones incomodas, por ser altamente sensibles y no saberlo.

Así que cuando tras el taller online ‘La llave a tu hogar’ escucho: “acabo de descubrir que son maneras de ser y que las puedo manejar…ha sido un taller muy sanador para mí”, siento que se cumplió el propósito de realizar este taller.

Para terminar esta historia, me gustaría recordarte esto: cuando me acepto como soy puedo aceptar al otro también en su conjunto. Desde esta posición no cabe planteamiento de si hay ‘rarezas’ o si es ‘normal’, etc. solo vemos a la persona como es y también nos aceptarán tal cual somos.

Anna Lenhardy – Asesora de Vida

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